Otra de esas “verdades oficiales” que no se puede cuestionar ni matizar de ninguna manera.
Me han publlicado un estudio en Nature porque me ceñí a una narrativa que sabía que les gustaría a los editores. Esa no es la forma en que debería funcionar la ciencia. En teoría, la investigación científica debería premiar la curiosidad, la objetividad desapasionada y el compromiso de descubrir la verdad. Los prejuicios de los editores ejercen una gran influencia en las publicaciones. Los investigadores astutos adaptan sus estudios para maximizar la probabilidad de que su trabajo sea aceptado. Lo sé porque soy uno de ellos. @thefp
El artículo se centra en el cambio climático, pero los sesgos de los estudios son comunes a cualquier otro ámbito. Los investigadores quieren que su trabajo sea publicado. Cuantos más estudios tengan publicados, más probabilidades tienen de obtener una plaza académica de por vida con salarios de hasta 300.000$ al año.
El autor del artículo incluso da algunos (tristes) consejos para que los estudios sean publicados, en base a su experiencia.
- Tu trabajo debe reforzar la narrativa convencional (“mainstream narrative”)
- Debes ignorar, o al menos, minimizar las acciones prácticas que puedan contrarrestar el impacto del cambio climático.
- Céntrate en las métricas que causarán más impacto en los lectores (“clickbait”)
El estudio de este autor había concluído que había varias líneas de acción en la prevención de incendios con la capacidad de mitigar en más del 100% (o sea, darle la vuelta) al impacto del cambio climático sobre éstos. Y que no ha publicado esas conclusiones porque le habrían obligado a quitarlas. No se puede publicar nada que quite importancia al impacto del cambio climático