Fino, tras ver el vídeo de la de UK en contra de la multiculturalidad he de decir que no estoy de acuerdo con lo de que haya que aceptar los valores británicos de gratis. Está claro que sí cometes un delito te vas a la cárcel o fuera del país en casos graves. Ahora bien, eso de imponer unos valores a la gente suena a idea homogeneizadora, a no querer aceptar que tus vecinos pueden pensar de forma diferente.
¿Qué valores hay que imponer? ¿Cuáles son los valores españoles? ¿Los de vox, los de Peta, los de Puigdemont, los de Irene montero, los de Felipe VI?
¿Por qué una persona tiene que cambiar sus valores y cultura si no causa problemas, sea de oriente medio, inglesa, china o de Honolulu ?
¿Por qué tengo que aceptar el fish and chips si a mí me gusta la tosta con jamón?
Aquí lo que pasa es que hay gente que quiere que la sociedad sea como la idea que tienen en su cabeza, su idealismo. Su frustración es que el mundo no es como ellos quieren, y quieren modelarlo como intentaron los nazis, los soviéticos, los fascistas, y otros países. Son una isla y quieren estar así, aislados.
Cuando vives en el mundo real sabes que cada persona tiene su background y te importa un carajo esas diferencias. Te llevas con todos lo mejor que puedes, haces tú vida y te olvidas de estas tonterías. Eso es aceptación. Lo demás es un comportamiento autoritario, más propio de la adolescencia. @Openjaimer
Sí, pienso lo mismo. Cuando aceptas la entrada de gente procedente de otras culturas, puedes exigir que no delincan y que se integren hasta cierto punto. Pero también tienes que aceptar que cuando metes en tu país a gente de culturas muy dispares, no puedes exigirles que compren de pe a pa tu forma de ver la vida. Ni puedes ni debes.
Si dentro de 50 años hay mayoría musulmana, no tendrá sentido llevarnos las manos a la cabeza si votan islamizar el país. Hay que ser consecuente.
Por cierto, ayer fuimos a ver la peli de las Tortugas Ninja con el crío y me sorprendió. El estilo de los dibujos es bastante original, pero lo mejor es el guión y los diálogos. Me esperaba una pelo vacía y me encontré algo sorprendente. Os la recomiendo.
Muy curioso que la moraleja sea: de la piscina del bullying se sale nadando.