Si hubiera comenzado así el artículo eclesiástico, habría tenido un pase.
Usando los mismos argumentos de este señor, todo el cine de ciencia ficción, todo el cine de terror, el violento… y por extensión todos los juegos en los que se haga cualquier cosa ilegal, como conducir a lo loco, robar, disparar… y por extensión todo lo que hagamos y veamos a diario que se pueda considerar negativo, incívico… vamos, que este señor quiere vivir en Nueva Nueva York, de Demolition Man.
Y mejor que no os paséis por los comentarios de la noticia, porque es descorazonador. Si queréis ver algo sensato tenéis que ir a los últimos comentarios que están hundidos por negativización masiva.
A estos seres me los imagino escribiendo así:
No me los imagino como seres de moral perfecta, que solo quieren que los demás sean tan buenos y castos como ellos. No. Me los imagino como personas con complejos, que ven sus propias partes oscuras que saben que no tienen del todo bajo control, y que proyectan en los demás sus problemas pasados y/o presentes. Creo que la gente realmente peligrosa es la que quiere acabar con estas cosas. Son algo así como curas modernos.
No, cuando les cae en el ojo sonríen como pueden, y se nota que lo fuerzan, porque son actrices, MELÓN. El que lo ve, entiende que ella se está esforzando por no mostrar desagrado, igual que la recepcionista de hotel que tiene que aguantar tu aliento pútrido y tu cara de acomplejado con una sonrisa en la boca, porque para eso le pagan. Bueno, sigamos, que me caliento.
Cuando estas personas hacen la crítica al pr0n, la hacen siempre hablando de ese género como si fuera un todo, igual que cuando hablan de las putes. Como si todas estuvieran explotadas, como si todas estuvieran ahí a la fuerza. Yo hace tiempo que solo veo “homemade” de usuarios verificados de Pornhub. Son parejas que hacen lo que quieren, se graban, y cobran una comisión. Ellos crean contenido, tú lo ves, ellos cobran, tú disfrutas (ellos también), y todos contentos. Es como el Youtube de los adultos (esto ha sido intencionado). Además también hacen “colabos”. Y no veo esa categoría porque me sienta mal por haber visto otras cosas, o quiera redimir mis pecados ni nada parecido, simplemente es la que me parece más realista y la que más me gusta a día de hoy. Pero me da igual, si a ti te gustan cosas más cañeras, ¿por qué deben censurarse? ¿Hay algún argumento importante en su contra? Ya te lo digo yo: NO.
¿El pr0n crea “salidos”? ¿o son los “salidos” los que por demanda invitan a la industria a crear ciertos contenidos? ¿qué más da? Si veo algo cañero, me gusta, busco a una chica que le guste, lo hacemos, y somos felices… ¿qué problema hay? ¿Los que lo hacen a la fuerza? ¿de verdad alguien piensa que eso es culpa del pr0n? Lo único que sé es que de momento van ganando, porque han conseguido que debatamos algo que nunca deberíamos debatir, y por las connotaciones de la cosa que se debate, partimos con desventaja ante el buenismo imperante. Es hora de mirar a los fantasmas a los ojos, llevan demasiado tiempo alimentándose de nuestro miedo al rechazo. Se han hecho muy grandes, pero en cuanto les demos la cara, desaparecerán.
Ayer os recomendé el último monólogo de Bill Burr que además está en Netflix, y no puede venir mejor para ilustrar este post. Un tío inteligente dejando un cacho de su cabeza en el escenario para el que lo sepa apreciar.