Esto me recuerda a…
– Señor juez… Estaba yo pelando una naranja cuando de repente me tropecé… con la mala fortuna de caer encima de ese señor, clavándose el cuchillo en su estómago.
– Claro, y así 18 veces ¿no?
Noticia @laopiniondezamora enviada por Oneillo.