Ha vuelto a perder la oportunidad de hacer un mortadelo épico.
Kayabuki no Sato, una pequeña aldea en Kyoto famosa por sus casas con techos de paja, tiene un curioso sistema de extinción de incendios basado en gigantes aspersores que convierten todo el lugar en una fuente.
Al tener los tejados de paja, estas casas son increíblemente vulnerables a los incendios, los cuales pueden propagarse con mucha velocidad y quemar el pueblo entero. En el año 2000 tuvieron un susto con este asunto, quemándose un edificio, y decidieron instalar este sistema que testean dos veces al año (normalmente en mayo y diciembre), y todos los habitantes de la aldea y de los pueblos aledaños se acercan a ver el espectáculo.
Vía.
Con la puesta en órbita de un satélite, la primera misión comercial del Falcon Heavy ha sido un éxito, y supone un hito en la industria aeroespacial.
Aquí visto desde la “gopro” de los propulsores. Uno de ellos aterriza en una plataforma móvil en el mar 😀
[…] Ian Cognito , comediante de 60 años, se encontraba en un bar de la localidad inglesa de Bicester, cercana a Oxford, realizando un show cuando sufrió un ataque cardíaco.
Diez minutos antes, Cognito había ironizado sobre su propia muerte con un chiste que provocó que el público siguiera con las risas cuando el artista comenzó a sentirse mal y a respirar con visibles dificultades antes de sentarse en un taburete y permanecer allí inmóvil durante varios minutos. Los servicios de emergencia que acudieron al lugar lo declararon “muerto en el escenario”. […] @lavanguardia enviado por @linkvron