Me veo en la obligación de darle voz a esta mujer: esto es lo que está pasando con el sector primario y la vida rural.

Es un grito desesperado desde un sector que parece abocado a desaparecer. Hemos vivido esto mismo con otros sectores (muchos de ellos industriales), y con el tiempo siempre acabamos echándonos las manos a la cabeza de lo que perdimos por no haberlo gestionado bien.