Aquí la entrevista completa.
Aquí la entrevista completa.
Por lo visto es muy raro, pero pasa a veces. Yo mismo tengo un tercer pezón (diminuto, parece un lunar) y mi hijo también, pero lo tenemos justo debajo de un pectoral.
Hace unas semanas veíamos para qué servían estas bolas, que no están vacías para que no se las lleve el viento. Ahora toca ver si se puede nadar en un lago que use estas bolas para impedir el paso de la luz.