Lo evitan y los marroquíes los amenazan. El propietario llama a la policía. Los okupas les enseñan un vídeo cocinando y el propietario enseña las escrituras.
La Policía echa al propietario y su familia.
Un caso de ocupación ilegal ha dejado a un vecino de Girona, Jordi Riera, ya toda su familia, en una situación de desesperación e impotencia . Su familia ha sido víctima de una okupación por parte de desconocidos, con una serie de hechos que han puesto en evidencia las deficiencias de la legislación actual y la falta de apoyo institucional ante este tipo de situaciones, también del gobierno municipal de Girona, controlado por la CUP, Esquerra y Junts, con una reacción tibia. @elnacional
Lo tenéis todo explicado en elnacional.
