paella
Lo que piensan las cajeras del Mercadona cuando entras a 5 minutos del cierre
Un capítulo no apto para valencianos
“Una vez le hice una paella a mi exprometida y dijo que no le sabía auténtica. He pensado que, como le tengo delante…”, declara el personaje de Gettier. Impasible, Stone le pregunta qué ingredientes le echó, y la respuesta es una pesadilla culinaria capaz de conducir a conflictos autonómicos: pollo, salchichas, gambas, calamares, tomates, cebolla, ajo, mejillones… Stone va lanzando palabras sin parar, y a todas ellas el gerente del hotel asiente con la cabeza. Por último, el cocinero dice “ya, es que es demasiado, tío” y se marcha mientras Gettier asiente y apunta algo en el papel. Consulta terminada. @20minutos
*Sufriendo en valenciano* pic.twitter.com/Eh78pBjWmv
— Netflix España (@NetflixES) January 27, 2022
La receta es tan bizarra que he llegado a pensar que los guionistas han buscado que el personaje esté intentando trolear al que le pregunta por la receta.
Más tеrrorismo culinario
Hola Findus, me acabo de descargar un ebook gratuito de recetas para ir de camping yme he encontrado con un nuevo caso de terrorismo culinario digno de tu gama de productos ulttacongelados: paella de fuet, tomates cherry y surimi… Un plato con mucho “punch”. Se sentirán igual los italianos con la pizza de piña? @Jugon86.
Los mejores chollos en Chollometro
Paella al estilo asiático
Hola Fino, mirando las sugerencias de la salsa de soja que he comprado hoy he encontrado esta aberración que te envío. Sé que la mayoría pensáis que la paella es arroz con cosas pero hasta el extremeño más cabrón de un restaurante típico asturiano de Nueva Delhi sabrá ver que pocos crímenes más atroces se han cometido contra la cocina patria. @Nukethewhales_
No hombre no…
Según The Wall Street Journal, «los puristas valencianos temen que toda esta atención esté pervirtiendo la receta tradicional de la paella», al mismo tiempo que rescata más casos de españoles en Nueva York sorprendidos por las «variedades» que se han encontrado en la ciudad estadounidense. Es el caso de Pablo Pérez, empleado de una sucursal bancaria, que apunta que se sintió «ofendido» cuando le sirvieron un «arroz amarillo con trozos de chorizo». @abc