Tres de las cuatro mujeres que aparecen en esa imagen con la camiseta de Infancia Libre, tras una visita al Senado, invitadas por Podemos, han sido arrestadas ya.
Los hechos, nuevamente, son similares a los que han conducido en los últimos dos meses a las detenciones de María Sevilla y Patricia González por el secuestro de sus propios hijos: la arrestada, hace dos años que incumple el régimen de visitas con su ex pareja. De hecho, tiene dos procesos abiertos por desobediencia a raíz de ese incumplimiento, aunque no por sustracción de menores, como en el caso de las otras dos mujeres.
Y ojo con esto:
Y a todo esto, PDRO SNCHZ, Rajoy, y demás fauna que apoyan a Juana Rivas a cierraojos, callados como p_t_s.
@elmundo enviado por ThugLife.
En un principio fue absuelto, porque para agredir debe haber intención de agresión, pero luego…
[…] La sentencia del Tribunal Supremo concluye que el hombre agredió a la mujer y explica que si buscaba prestarle ayuda por un posible coma etílico tendría que haber llamado a una ambulancia y no pegarle dos tortazos. “Si, en verdad, la vio en un estado preocupante lo que tenía que haber hecho es haber requerido los servicios de una ambulancia que pudiera intervenir con personal médico profesional que pudiera atender a la víctima, y no darle dos tortazos para reanimarle“.
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Me siento segurooooo
[…] Pasó más de tres años en prisión, después de que su ex pareja le denunciara por abusos sexuaIes continuados a su hijo menor de edad, con un relato de actos que el tribunal llegó a calificar de «aberrante» y al que no dio crédito.
A T. L. R., aquella denuncia que lo llevó a la cárcel (ampliada por otras posteriores) le supusieron mucho más que su encarcelamiento: el dolor y la ruptura de las relaciones y vínculos con su hijo. […]
¿Han dejado libre a ese monstruo? falta perspectiva de género en esa revisión del caso.
Los mejores chollos en Chollometro
Opino exactamente igual. Hay que asegurar un marco de igualdad de oportunidades, pero no forzar una equiparación. Cada uno cobra en función de lo que genera/vende.
Si quieres cobrar más como mujer deportista, hay mucho camino por recorrer, pero no por parte de los que pagan, sino por parte de tus amigas, familiares y conocidas, que no consumen deporte.
@C-16
El artículo de laboro habla sobre discriminación directa e indirecta.
De todo el texto, lo que me ha llamado más la atención es el ejemplo de las limpiadoras y los mozos de almacén. Deduce (falazmente, a mi parecer) que el hecho de que más hombres sean mozos de almacén y más mujeres sean limpiadoras, se debe a motivos de discriminación indirecta, ya que a los mozos les pagan más que a las limpiadoras, siendo ambos trabajos del “mismo valor”, por requerir poca o nula formación.
Mientras nadie le impida a una mujer ser moza de almacén, o a un hombre ser limpiador, el único que tiene potestad para fijar un sueldo (superior o igual al convenio) es al empleador. Para mí está claro que el trabajo de mozo de almacén es menos “ligero” que el de limpiadora. Si se pagase lo mismo al mozo de almacén, y a la limpiadora, sería previsible que los mozos de almacén quisieran ser limpiadores, y muy seguramente ninguna limpiadora querría ser moza de almacén, si antes cobrándose más tampoco querían (o su inferior físico no interesaba para el puesto).
Vuelve a fallar cuando deduce que el hecho de que haya más hombres en puestos de responsabilidad, se deba necesariamente a que haya un proceso discriminatorio en el proceso de promoción, porque “hay más cajeras mujeres, y más hombres con chaqueta negra en los supermercados”.
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