cárcel

David Suárez opina sobre su juicio por hacer humor negro

Lo que dice a partir del minuto 7:50 es una cosa que yo también pienso desde hace bastante tiempo, y he podido comprobar con algunos casos prácticos.

Muchos de esos pielesfinas, moralistas, y quejicas en Twitter (y fuera de Twitter), son en realidad basura humana. Gente con un interior realmente chungo, gente que proyecta su basura mental en los demás. Ellos que no son capaces de abstraerse en un chiste, ellos que solo conciben ese chiste como una humillación o una herramienta para hacer daño, proyectan esa interpretación en los demás. Luego están los que se comportan así para ganarse la simpatía de otras personas, o sus likes, o… su cama 🙂

Este tipo de persona me recuerda un poco a los “ex”-alcohólicos. El que tenga algún conocido alcohólico sabe que un alcohólico nunca deja de ser alcohólico. Esta gente son como un “ex”-alcohólico que te ve tomarte una birra y cree que lo haces porque eres adicto, porque tienes un problema. Porque está proyectando en ti su punto de vista, él no entiende que lo hagas sin adicción, sin que represente un problema, sin que haya toxicidad detrás. La birra es el chiste machista. Y suele coincidir que muchos de estos “pontificadores de la moral” tienen un pasado un poco “loquillo” en el que hacían chistes super burros en los que sí se podía esconder una importante inquina. “Ay en mis años jovenzuelos yo era un idiota, pero he cambiado”. Seguro que se os viene a la cabeza más de un ejemplo.

¿Alguien recuerda la última vez que un chaval intentó matar a otro por insultar a Yisucraist en España?

¿Alguien recuerda la última vez que un chaval intentó matar a otro por insultar a Yisucraist en España?

¿Alguien recuerda la última vez que un chaval intentó matar a otro por insultar a Yisucraist en España?

[…] Los hechos reconocidos en el juicio por el joven estudiante ocurrieron sobre las ocho y media de la mañana del 29 de octubre de 2019 en el instituto Torrevigía número 5 de Torrevieja. Cuando apenas quedaban diez minutos para que concluyera una clase de inglés, el acusado, que tenía entonces 18 años, se levantó de su silla y se acercó por detrás a un compañero de clase, de 17 años, con la intención de matarlo “por una blasfemia” contra la religión islámica que profesa el acusado. Al llegar al pupitre de su compañero comenzó a agredirle con un cuchillo jamonero de 27 centímetros de hoja y 13 centímetros de mango que llevaba guardado en su mochila y había cogido el día anterior de su domicilio.

El alumno atacado de forma sorpresiva recibió una primera puñalada en el costado derecho sin que pudiera defenderse y a continuación otra por la espalda a la altura del corazón.

El acusado no pudo asestarle más cuchiIIadas a su compañero de clase porque se dobló la hoja pero sí que empezó a golpearle con el arma blanca en la cara. […] @levante-emv


5 años por un intento de asesinato con premeditación… parece que el juez ha usado la perspectiva de las podegafas…

¿Alguien recuerda la última vez que un chaval intentó matar a otro por insultar a Yisucraist en España?

Los mejores chollos en Chollometro

¿Va a ir a la cárcel Eduardo Inda?

¿Va a ir a la cárcel Eduardo Inda?

¿Va a ir a la cárcel como dicen en esta noticia? Pues… no, no va a ir a la cárcel. De hecho se va a beneficiar de un concepto llamado “derecho a rectificación”, muy bien explicado en este vídeo por Ley y Desorden y David Bravo.

Aunque la sentencia me mola y la ha recibido un cliente habitual, estoy leyendo que Inda está más cerca de ir a la cárcel por una condena que acaba de recibir. Lo cierto es que ni cárcel y ni siquiera tendrá que pagar costas, lo que sí tendrá que hacer (que no es poco) es publicar un texto íntegro de rectificación de una noticia en OKDiario. No sé si a los finoliers esto les interesa algo, pero bueno por si acaso te lo mando. @dbravo.

3 años… 3 AÑOS

3 años... 3 AÑOS

Decoloraba la pintura de la puerta.

Esto obligaba a la mujer a tener que limpiarlos a las 06.30 horas, antes de irse a trabajar, ya que, si no lo hacía así, al secarse, llegaban a decolorar la pintura. Esta conducta ha generado en la mujer un estado de ansiedad que le ha obligado a cambiar sus hábitos de vida y que le ha afectado al sueño.

3 años... 3 AÑOS

@elcomercio enviado por Pepe Viruelas.