Resulta que hay una gata obesa que se negaba a iniciar su tratamiento para adelgazar, consistente en pienso dietético y EJERCICIO.
Por cierto, en el veterinario la apodaron ‘Cinderblock’ (‘bloque de ceniza’, en español), debido a su ‘semejanza’ con los bloques de hormigón fabricados con ceniza volante.
Bueno, el caso es que al fin han conseguido que ande un poco en la cinta.