La propuesta de aplicar aranceles a las baterías de vehículos eléctricos de China ha atravesado hoy un día crucial. Los Estados miembro han votado si continuar aplicando una tasa adicional de un máximo del 35,3% durante los próximos cinco años a este tipo de importaciones, una cifra que se sumaría al 10% que ya se aplicaba. Los países de la UE no han logrado alcanzar una mayoría de bloqueo para tumbar la medida, por lo que el bloque continuará aplicando aranceles adicionales a las importaciones de coches eléctricos de Pekín durante cinco años. Una decisión que será clave para determinar el porvenir de unas tensas relaciones comerciales con Pekín. @eleconomista