Esta gente existe, pero la ley está siempre de su lado, aunque sean verdaderos demonios. ¿Y por qué ganó él? porque su abogado le recomendó grabarlo todo y tener siempre testigos:
¿Quién pediría eso a su cliente si la parte contraria necesitase pruebas para que le condenasen? (guiño, guiño)
Finalmente valió la pena tener esas precauciones y la mujer fue condenada a 1 año de prisión y a 2 años sin poder ver a su hija.
Y aún así…
Ahora solo tiene que salir en la TV diciendo que lo hizo para alejar a su hija de su padre maltratador y le damos la vuelta a la tortilla. ¡Ánimo!