Alquilar un apartamento en primera línea de playa en el mes de agosto en la costa española se ha convertido en un privilegio que está fuera del alcance para la mayoría de los españoles porque su precio ya ronda los 5.000 euros de media. Si el verano pasado fue una experiencia prohibitiva, con un precio medio de 4.220 euros, este lo será todavía más porque ha subido un 9,95%, hasta alcanzar los 4.640 euros, según un informe publicado este jueves por Tecnitasa. @20minutos