Cuando en el camino de regreso el hombre y la abuela de su pareja «pasaban por la calle Fuentes de Campos de Bellavista, cercana a sus respectivos domicilios, con una clara intención libidinosa, el acusado cogió una mano de la mujer y la colocó sobre sus genitaIes al tiempo que le decía ¿ves cómo me pones?«, figura en el relato de hechos probados.
Merced a este relato de hechos probados, la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla impuso al hombre cuatro años de cárcel por un delito de agresión secsual con la agravante de parentesco, seis años de prohibición de acercarse a la víctima o comunicarse con ella y una indemnización de 4.000 euros en favor de la mujer. Tras un recurso, quedó en 3 años y 10.000 euros de indemnización. @20minutos