tecnología

El drone cabronías: De los creadores del AK-47 llega el drone suicida

El arma que aspira a revolucionar, otra vez, la guerra

[…] ¿Cómo? Mediante el KUB-UAV, un pequeño drone capaz de volar a 130 kilómetros por hora y de transportar hasta tres kilos de carga explosiva. ¿Su secreto? Es deshechable. O lo que es lo mismo: es un kamikaze, un dispositivo suicida que permite a cualquier ejército operarlo a más de 60 kilómetros de distancia. Localizado su objetivo, el drone cae sobre él. Y cuando contacta, explota. […] [@xataka]

Ya vimos algo parecido con drones cabronías más pequeños:

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Cómo construir una Esfera de Dyson – La megaestructura más ambiciosa imaginable

Aún juntando todos los recursos energéticos de la Tierra, no podríamos “emigrar” a otro planeta. Para sacar una gran cantidad de masa (y personas) de la Tierra, hace falta una ingente cantidad de energía, y para conseguirla tenemos un gran recurso no muy lejos de aquí: el Sol.

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Los mejores chollos en Chollometro

Nissan/Infinity VC-Turbo: el primer motor con ratio de compresión variable

Los motores de combustión para coches van a desaparecer, es un hecho. Casi todas las marcas están simplificando sus diseños (modulares) preparándose para el desmantelamiento paulatino de esta tecnología, pero Nissan ha dado un último estirón y ha revolucionado el concepto del cigüeñal tradicional, añadiéndole un árbol de bieletas que controla el recorrido de los pistones, mejorando la eficiencia sin sacrificar potencia en altas demandas de acelerador (la cilindrada se mantiene constante, ya que la carrera del pistón no varía). También incorpora la doble inyección (directa e indirecta) así que con todo, estamos ante un motor de doble personalidad, con cambios de humor, pero no una vez al mes, muchas veces por segundo 😉

Parece un publireportaje, pero no, no me han pagado nada, lo juro por Spiderman.

El sistema auto-reverse de cassette más innecesariamente complejo del mundo

Antes de que llegasen los soportes digitales, como el CD, el mundo de la música usaba la cinta de Cassette, que convivía con el más maduro pero cada vez menos utilizado disco de vinilo. Este soporte tenía muchas ventajas, entre ellas el tamaño, pero también tenía un inconveniente: para aumentar la duración de las cintas, se grababa en dos caras, y había que darles la vuelta para escuchar la cara B.

Las marcas de reproductores quisieron automatizar este paso para que el consumidor no tuviera que ver interrumpida su sesión musical, y con esa necesidad surgieron distintas tecnologías, algunas de lo más curiosas.