De nada.
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Biden, 2019: "Imagine what can happen in Ukraine" if Trump is reelected.pic.twitter.com/8CIlaETgdi
— Kyle Martinsen (@KyleMartinsen_) February 25, 2022
Trump le comentó a la UE en 2018 que andar a dos bandas enriqueciendo a Rusia mientras querían protección contra ellos, era un poco… “raro”.
En 2018 Donald Trump advertía a la OTAN del peligro que representaba que Alemania dependiera del 70% del gas de Rusia: "Se supone que tenemos que protegernos de Rusia pero le compran todo el gas y los llenan de dinero".#TerceraGuerraMundial pic.twitter.com/C6NkDhFQmd
— Pablo Reisch (@JPabloReisch) February 26, 2022
Con estos mimbres se pueden hacer un montón de cestas diferentes. Este post no es una defensa de Trump, es solo un ejemplo de cómo las cosas a veces no son como nos las presentan. Aquí todos tienen intereses, y todos juegan sus bazas, unos mejor y otros peor. Lo de los buenos y los malos está ya bastante amortizado, hay que madurar.
IU haciendo piruetas para pedir el NO A LA GUERRA pero atribuyéndoselo a la OTAN. De Putin ni rastro 😀
Buen momento para recordar la propaganda turbomierder del PSOE hace más de 30 años, con el ambiguo slogan “OTAN de entrada no”.
“Nuestro partido no asume la decisión de integrarse en la OTAN, y, por consiguiente, estará en contra de la misma, con las consecuencias históricas que tenga mantener una coherencia lógica entre lo que decimos y lo que pensamos hacer” – Felipe González.
Eso era lo que decían antes de gobernar.
Sin embargo, meses después, en octubre de 1982, el Partido Socialista Obrero Español se alza con la victoria en las elecciones generales por mayoría absoluta, lo cual en el imaginario de la población con ideología progresista debía suponer la salida inmediata del Tratado Atlántico.
Lo que ocurrió más tarde, ya con el PSOE gobernando, debería incluirse en los anales de la práctica política inconsecuente o, a mayores, en algún tratado sobre el “misterio bufo”.
Donde dije digo, digo diego. Convocaron el referendum porque estaban obligadísimos, pero hicieron campaña POR EL SÍ.
Por si alguna vez pensáis que vuestros votos realmente tienen influencia en las decisiones importantes, ni siquiera prometiendo algo troncal como no ingresar en una alianza que tomará decisiones vitales en nombre de tu país, van a cumplir su palabra. Populismo puro.
El día que se tengan que firmar las promesas importantes ante notario con represalia de convocación de nuevas elecciones, igual empiezan a ser algo más que papel mojado.
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