Al sobre (enviado por 61M3N0)
Acostumbrado a terrenos no precisamente lisos, Abdul se ha curtido patinando por las superficies más hostiles, y con el material más mierder. Se hizo famosete en su pueblo, y un grupo de pastosos ruandeses le contrató como profesor de patinaje para sus hijos.
Enviado por Cacaolat:
El Superheroe que nadie esperaba. Esperemos que alguien le compre un casco.
En México a los camellos los descuartizan (sobre todo a los que se portan mal). Los árabes no se complican la vida. Del tirón al fuego, y como mucho les cortan la cabeza.
Parece que es como el pavo para esta gente…
¿Hay hambre?