“Tengo la regla, pero si quieres puedes darme por detroit“. Es la frase más romántica que me han dicho nunca.
“Tengo la regla, pero si quieres puedes darme por detroit“. Es la frase más romántica que me han dicho nunca.
Los agentes acuden a comprobar los motivos por los que otros ganaderos han acusado a esta señora y ella se defiende diciendo que solo la denuncian por ser mujer. Llama la atención el vertido de purines justo al lado del cauce de un arroyo. La gran concentración en nitrógeno del purín lo hace altamente peligroso para las masas de agua de su entorno.