Igual le pidieron muchas palabras y con aumentar el tamaño de la letra no le era suficiente…
Demasiado lento para mear, y demasiado rápido para cagar en equipo.
Un perro que no solo tolera los fuegos artificiales, y los petardos, es que además le gustan.
Podemos ver el frame exacto en el que se da cuenta de que no ha sido buena idea chupar la alfombra del baño: