El colapso del gigante inmobiliario Evergrande sigue batiendo récords por sus proporciones. Tras la declaración de insolvencia, la detención de la cúpula directiva y la orden de liquidación de la compañía por parte de la justicia hongkonesa, llega un nuevo golpe contra la que fuera una de las mayores inmobiliarias chinas, hoy convertida en la más endeudada del mundo. La Comisión Reguladora del Mercado de Valores del gigante asiático ha acusado a la compañía de inflar sus ingresos en 78.000 millones de dólares (72.000 millones de euros) en los informes anuales de 2019 y 2020 y ha impuesto duras sanciones contra la empresa, su fundador y otros cinco cargos directivos, a quienes acusa de graves actividades fraudulentas e irregularidades contables. @elpais