El perro, un Border collie, había sido diagnosticado con una enfermedad provocada por garrapatas. Su salud empeoró, el veterinario no tenía ni idea de qué podría ser: le recomendó esperar a ver qué pasaba, pero al dueño no le pareció buena idea. Así que se puso a investigar por su cuenta con GPT-4: le pasó los resultados de los tests sanguíneos y aunque GPT-4 argumentó que “no era un veterinario”, sin embargo interpretó toda la información que se le pasó y acertó con el diagnóstico: Anemia Hemolítica Autoinmune. El 2º veterinario lo confirmó. @peakcooper