“El calamar, que medía unos 75 cm de largo, descendió sobre nuestra cámara suponiendo que era una presa y trató de asustarlo con sus enormes faros bioluminiscentes”, dijo la profesora asociada Stewart. “Luego procedió a rodear con sus brazos una de las otras cámaras, que a su vez recogió el encuentro con mayor detalle. Creo que tuvimos mucha suerte de haber presenciado esto”. @vistaalmar