Antònia Jover, de 74 años, vivía como inquilina en el inmueble junto a su hijo y su pareja desde hacía ocho años.
Postrada desde hace tres años en una cama, acompañada de su gato, Antònia Jover, de 73 años, ve sus días pasar. Atrapada en un cuerpo que no desea, depende completamente de un respirador: «Apenas me puedo mover», decía esta mujer, que sufre obesidad mórbida, un día antes de ser desahuciada junto a su familia del piso donde vivían desde hacía casi ocho años en s’Arenal por impago en el alquiler. @ultimahora
El que ha puesto la intro de The Office de fondo mientras la bajaban es un genio del mal.
Me imagino a la mujer retando al dueño del piso “no me puedes echar, no quepo por la puerta” y el inquilino… “sujétame el cubata…”.