136 km/h, que puede no parecer una velocidad estratosférica, pero es toda una hazaña para una tecnología aún sin pulir.
Esta investigadora es la artífice de un algoritmo que corrige las fotos submarinas, afectadas por una distorsión de la luz que ha conseguido cualtificar para poder contrarrestarla. Dice que pilla el Raw, le aplica su algoritmo mágico, y a tirar millas. Coloca una referencia de colores al lado del objeto que va a fotografiar, para ver si tras aplicar el algoritmo todo cuadra. Me imagino que así habrá logrado crearlo, aplicando los cambios de esa referencia al resto de la foto.
Atención Fino a las casas colgadas versión Hacendado que han hecho en Ocaña (Toledo). FDO: Anoni_mate.