Hablamos del Felis nigripes, el gato africano de patas negras, también conocido como el felino africano más pequeño (de hecho, más pequeño que un gato callejero), pero cuyo tamaño no debe hacernos caer en la trampa: no hay otro igual a él cuando se trata de cazar, alcanzando una tasa de éxito de depredación del 60 por ciento (los leones solo logran atrapar a sus víctimas entre el 20 y el 25 por ciento de las veces).
Y es que, pesando 200 veces menos que un león típico, captura más presas en una sola noche que un leopardo en seis meses. Su modus operandi: a diferencia de los grandes felinos, el gato de patas negras tiende a desaparecer entre los pastos altos de la sabana africana. @gizmodo
Enviado por LaChicaDel2cv.