Clara es CEO de Maldita.es.
Clara no está muy feliz después de que META haya anunciado que prescindirá de los Fact Checkers en todas sus plataformas.
Para representar su enfado, clara culpa a Zuckerberg de estar mintiendo, pero… irónicamente Clara no está siendo escrupulosa con la verdad.
Zuckerberg culpa del problema a sus propias decisiones y al mecanismo de censura que ellos mismos han creado, siendo los fact checkers uno de sus engranajes.
Lo mejor de todo es que ha eliminado el tuit, pero… ¿Ha rectificado?… no. Ha abundado en su error, irónicamente ilustrando el problema a la perfección.
Para empezar ya mueve la portería, y personifica en Mark lo que anuncia META: “Aquí está el comunicado donde Meta (Zuckerberg)…”
Pero el comunicado de Zuckerberg es uno (en vídeo), y el de META es otro (en texto). Aunque ambos se refieran básicamente a lo mismo, lo abordan de forma sensiblemente diferente.
Sea como sea, veamos qué dice ese comunicado de META:
Cuando lanzamos nuestro programa independiente de verificación de datos en 2016, teníamos muy claro que no queríamos ser los árbitros de la verdad. Tomamos lo que pensamos que era la mejor y más razonable decisión en ese momento: entregar esa responsabilidad a organizaciones independientes de verificación de datos. La intención del programa era que estos expertos independientes brindaran a las personas más información sobre las cosas que ven en línea, en particular los engaños virales, para que pudieran juzgar por sí mismos lo que vieron y leer.
No fue así como sucedieron las cosas, especialmente en Estados Unidos. Los expertos, como todos los demás, tienen sus propios prejuicios y perspectivas. Esto se manifestó en las decisiones que algunos tomaron sobre qué verificar y cómo. Con el tiempo, terminamos con demasiado contenido verificado que la gente entendería como discurso/debate político legítimo. Nuestro sistema tuvo entonces consecuencias reales en forma de etiquetas intrusivas y una distribución reducida. Un programa destinado a informar se convirtió con demasiada frecuencia en una herramienta para censurar.
El sistema que había creado META, que cedía a “expertos” la gestión de qué y cómo se verificaba, acabó llenando sus redes de verificaciones que estigmatizaban publicaciones legítimas con la marca infernal de “información falsa o inexacta”. Ese sistema creado por META, aplicaba una reducción de la visibilidad (shadowban) a la gente a la que se le imputaban esas verificaciones.
En resumen: el sistema formado por los verificadores y la moderación algorítmica de META estaba convirtiéndose en una herramienta de censura, al saber que si algo era verificado, acabaría resultando en la reducción de visibilidad de su emisor. Lo mismo que ha pasado con los reportes coordinados en webs como Twitter o Menéame. Instrumentalización del sistema de moderación.
Esta es una lectura honesta de ese comunicado. Lo que hace Clara con estos tuits es ilustrar perfectamente cómo los sesgos transforman una verdad en una supuesta mentira porque al fact checker le interesa.
Lo mejor es que ni siquiera se puede responder al tuit de esta “experta”, porque en su afán por la búsqueda de la verdad, solo permite réplicas de personas que ella siga. El chiste se cuenta solo.