Mientras “resuelves” el laberinto, los músculos de tus brazos echan fuegote.
Ya sea para bajar consumos, o aumentar potencia, las repros tienen una fama que en gran medida no merecen.
Análisis de un ñordo interestelar que vi cuando era un crío, y que había olvidado por completo. Recuerdo perfectamente que en su día ya me pareció un mierdón, y eso que era un crío, imaginad las dimensiones mierdíferas de esta película.
Si no te enteras, venimos de aquí.