Y como siempre, podéis añadir unos calcetines gratis al pedido usando el código SENTADO en el proceso de compra.
Además durante estos días están añadiendo unos calcetines gratis por cada camiseta pedida.
La Vanguardia prescindió de sus servicios después de publicar este tuit y ser cancelado en redes sociales:
Como es baluarte de la izquierda subnormal, el ‘equipo de opinión sincronizada’ con Silvia Intxaurrondo y Alberto Garzón a la cabeza, han salido en su defensa.
Pero no tiene defensa posible. El móngol lleva años defendiendo que la cultura de la cancelación no existe, y que de existir sería… justa.
El que llamaba a los cancelados “mamá-pupa” se ha pasado el día llorando en Twitter porque le canselan.
Ah, y por si no parecía suficientemente down, también tiene tiempo para hacer crítica deportiva del más alto nivel.
Nadal será recordado como la leyenda que es, ¿Por qué será recordado Pedro Vallín?
Errejón decía que las denuncias falsas “no existían”, Vallín que la cultura de la cancelación tampoco… pues: A MAMAR.
A la gente que vota socialismo y se sorprende de los resultados habría que preguntarles…
¿Es tan sorprendente?
¿Cómo puede ser que gente educada en el capitalismo, la austeridad, el ahorro y la familia haya logrado comprarse un piso? ¿Cómo puede ser que los jóvenes de ahora, con alergia a las relaciones estables, que no entienden la vida sin vacaciones en Ibiza, 3 o 4 suscripciones de streaming y un iPhone valorado en 3 letras de hipoteca que cambian cada 3 años, no les quede dinero para acceder solitos a una vivienda?
¿Ha sido imposible acceder a una vivienda en propiedad hace 5 o 10 años? ¿Ha sido siquiera muy difícil hacerlo? Si quieres vivir solo, salir, viajar y hacerlo todo con un sueldo normalito…
Pero hasta hace muy poco se ha podido acceder a viviendas de precios razonables con hipotecas muy ventajosas y letras rondando los 500 euros al mes en la mayoría de ciudades del país (España no es solo Madrid centro y Barcelona). Algo que era muy muy pagable para una pareja. Pero claro, el alquiler “no te ata”, hoy estás aquí, mañana allí, y no te obliga a ahorrar 30.000 euros (cada uno) para una entrada.
Ahora que nos pilla el toro con este ciclo chungo de la vivienda nadie habla de lo que acabo de decir. Porque mientras esa posibilidad estaba ahí, una generación entera saturó el mercado del alquiler, y ahora que les parece un timo, no ven posible acceder a una vivienda en propiedad porque los precios han subido, las hipotecas ya no son gratis, y no han ahorrado “porque para ahorrar tan poco, me lo gasto”. He escuchado esa frase muchas veces en distintas formas.
Supongo que piensan que en algún momento tendrá que venir alguien a arreglar esto…
Paralelamente el Gobierno no ataca el problema de la okupación y los impagos, y por tanto cada vez más viviendas salen del mercado de alquiler por falta de garantías. Y los propietarios piensan… ¿Para qué voy a vender el piso si cada vez vale más y la inflación se comería el dinero en el banco? La tormenta perfecta.
Pero bueno, que la culpa de todo es siempre de alguien muy malo, muy nazi, y nunca de lo ilusos que podemos llegar a ser.