Hoy los vecinos del pueblo se han pasado por ahí. Solo faltaban las antorchas. Al final la cosa ha terminado como empezó, los okupas siguen dentro de la casa, pero 2 personas que protestaban han acabado detenidas por lanzarles piedras.
Hoy los vecinos del pueblo se han pasado por ahí. Solo faltaban las antorchas. Al final la cosa ha terminado como empezó, los okupas siguen dentro de la casa, pero 2 personas que protestaban han acabado detenidas por lanzarles piedras.
Te mando una de lo que parece otra historia de seres bioluminiscentes en propiedades ajenas. El pobre sobrino del dueño tiene que quejarse con la pertinente coletilla, no sea que se le tache de rasista: “No me importa ni la raza ni la procedencia de estos okupas. Ellos tendrán derechos, no lo dudo, pero estos se acaban cuando pisotean los derechos de los demás como han hecho con mi tío“. @ ElReyChino
Manda huevos que los familiares tengan que movilizar a los vecinos porque la justicia está a por uvas…
[…] Una vez alertado de la okupación, José Antonio, acompañado de la policía municipal, acudió al inmueble donde uno de los okupas les presentó un contrato de alquiler de la casa. “¿Quién les ha firmado a ustedes este contrato? ¿Mi tío?”, preguntó estupefacto este hombre, mecánico de profesión, que dio sus primeros pasos en la mecánica en el patio de esta finca familiar. “Al final, la policía les requirió el contrato y pudieron comprobar que era totalmente falso por lo que creo que se les va a imputar un delito de allanamiento de morada”, apuntó este hombre que precisamente estaba reparando la vivienda y acondicionando algunos servicios básicos “para cuando viniera mi tío. La vivienda no estaba abandonada y yo venía realizando reparaciones para acondicionar la casa pero no está en condiciones para que residan niños. Por no tener, no tiene ni ducha”, subrayó José Antonio que ahora teme por el futuro de la herramienta, de importante valor económico, que se ha quedado en el interior del inmueble. “A estas alturas sería un milagro que aún estuviera. Mucho me temo que ya la hayan vendido, aunque lo que más me duele es que se habrán desecho de documentación y de efectos familiares de gran valor sentimental”. […] @deia