

Un caso insólito ha sacudido al sistema sanitario británico. Neil Hopper, un reputado cirujano vascular de 49 años, fue condenado este jueves a 32 meses de prisión tras admitir que había congelado deliberadamente sus piernas con hielo seco para provocar su amputación y, posteriormente, cobrar más de medio millón de euros en indemnizaciones de seguros. @elespanol

Los mejores chollos en Chollometro