“Pekín y Bruselas se necesitan mutuamente, más en estos momentos de incertidumbre global”, opina Yao Ling. “El crecimiento económico de la UE sigue dependiendo del acceso al enorme mercado de China. Y hay que recordar que, durante la crisis de la deuda soberana europea, el sólido crecimiento de las exportaciones a China y la afluencia de capital chino fueron fundamentales para impulsar la recuperación económica de la UE. Según las estadísticas, el comercio bilateral sustenta el empleo de tres millones de personas en la UE y seis millones en China”. @elmundo