El Parlamento alemán aprobó ayer una moción a propuesta de la Unión conservadora para endurecer la política migratoria. La proposición, que contó con el apoyo de los ultras de Alternativa para Alemania (AfD), pide el rechazo total de los solicitantes de asilo en las fronteras alemanas y, para muchos, es el culmen de una escalada política que, zozobrada por la campaña electoral, desató el ataque con cuchillo en la ciudad de Aschaffenburg, en el sur del país, que se saldó con dos muertos –uno de ellos un niño de dos años– y por el que se detuvo a un solicitante de asilo afgano al que se había ordenado abandonar el país. Un suceso que ha hecho tambalear el cordón sanitario erigido contra los populistas de AfD y que ha llevado la controversia sobre la inmigración en Alemania hasta el centro del debate político. Una segunda solicitud de la Unión con propuestas de reforma integral para una política migratoria restrictiva y poderes adicionales para las autoridades de seguridad fue, en cambio, rechazada por el Bundestag. @larazon
Me gustaría saber por qué Marhuenda los llama «ultras» en su diario (La Razón). Me gustaría, en general, saber por qué se imponen estas denominaciones arbitrarias y a qué interés responden.
AfD, hasta donde yo sé y por la información que tengo, es un partido conservador nacionalista y euroescéptico. Un equivalente a VOX, que viene a ser un PP antes de su psoización.
Sigo sin saber qué es la «ultraderecha».