Qué mala suerte, pensaréis…

Qué mala suerte, pensaréis...

Pero atentos a lo que pasó…

Esta mujer compró una casa para vivir con su hijo de 24 años. Sin embargo, la felicidad les duró poco. Farah adquirió un piso dos dormitorios en Edmonton, al norte de Londres, el pasado mes de mayo por 78.000 dólares. Era la casa en la que llevaban años viviendo de alquiler.

Sin embargo, apenas unas semanas después de la gran compra, le anunciaron todo el bloque de la finca sería derribado arrasado.

Finalmente, según informa ‘Daily Mail’, esta opción ha sido descartada y van a demoler las casas. A cambio, el ayuntamiento pagará 250.000 libras a cada uno de los propietarios para que puedan comprarse otra propiedad. @antena3

Qué mala suerte, pensaréis...