[…] Y entonces leo que han echado a un entrenador de alevines porque su equipo le metió 25-0 a un equipo. Al parecer, el motivo que alega el club es que el técnico ordenó que se siguieran metiendo más goles. “Nosotros educamos valores, como el respeto al equipo contrario y esa actitud no podemos admitirla”, dice el club, el CD Serranos.
Esto demuestra que no entienden nada, absolutamente nada, sobre el deporte. Lo humillante no es que te metan 25, es que sean condescendientes contigo, que no te hagan más goles porque le des lástima al rival. Siempre, siempre, en cualquier deporte, quiero que el rival de lo máximo de sí, y si me caen 24, como aquel día de mi infancia, me dará igual siempre que yo lo haya dado todo, porque eso es lo que importa. En fin, que tengo la sensación que nos estamos volviendo todos locos con esta corriente de buenismo absurdo. […] [Artículo]
Qué recuerdos… en mi colegio había tanta gente que quería jugar en el equipo del instituto, que se hicieron dos equipos. ¿Nos mezclaron a todos de forma homogénea? nope, hicieron un equipo A y otro B. El equipo A tenía a todos los cracks, y en el equipo B estaba yo y todos los demás mantas. Bueno, alguno se libraba, pero porque a pesar de su nivel aceptable, no había hueco para él en el primer equipo. Yo era bastante malo con el balón, pero corría mucho (más adelante me pasaría a atletismo), y cada personaje del equipo tenía una “tara”, como en las películas. Yo era el torpe, luego estaba el gordo, el delgado, el enano… nos metían unas palizas del horror. Raro era el día que no perdíamos 11-0 o 13-0. Cuando metíamos un gol y acabábamos 12-1 lo celebrábamos como si hubiéramos ganado xd. Si hubiesen sido condescendientes con nosotros habría sido simplemente peor. No solo seríamos igualmente conscientes de que éramos malísimos, es que además daríamos pena.