La dirección de Lidl no sancionará a la trabajadora de uno de sus supermercados que fue denunciada por transfobia por una clienta transеxual. “Se trata de un error no intencionado por parte de una de nuestras empleadas que, rápidamente, pidió disculpas“, han señalado a 20minutos fuentes de la multinacional alemana. Fuentes sindicales coinciden con la dirección de la empresa e indican que la trabajadora “se confundió, pero le pidió disculpas inmediatamente” y destacan que su intención “no era molestar a nadie”.
“Se montó una escena y después de rellenar la hoja de reclamaciones nos siguió hasta la puerta pidiéndonos perdón, pero me seguía llamando caballero, con lo cual a mí me parece que la disculpa no fue sincera, sino un intento de que no entregáramos la hoja de reclamación”, ha añadido. @20minutos
Yo creo que con un “disculpe caballera” conseguimos el equilibrio en el Universo.