Ahora vamos a necesitar contrato de separación de bienes pre noviazgo. @PepeViruelas.
Israel Adesanya se enfrenta a problemas judiciales. La exnovia del campeón de la UFC, Charlotte Powdrell, le ha denunciado y pide la mitad de su patrimonio después de su ruptura porque “han salido durante mucho tiempo y le ha apoyado en su carrera”. No están casados ni tienen hijos (estuvieron juntos por 15 años), pero quiere la mitad de sus propiedades. El neozelandés de origen nigeriano le ha respondido por redes sociales con insultos y, su compañero Sean O’Malley, ha hablado de ellos en su podcast. “Ni siquiera sabía que tenía novia, pero querer la mitad de lo que ha hecho es absolutamente ridículo”, aseguró el peleador del peso gallo. @as
La respuesta del luchador:
“Ojalá te dejase ir a la deriva hacia una existencia miserable, porque la miseria ama la compañía y tú amas hacerte la víctima. De todas formas, firma el contrato de arrendamiento lo antes posible. También espero que tu abogado se levante y venga a por mis activos, como dijo, espero que intentes perjudicar tanto mis negocios como Puma con sus amenazas de p*** barata. Por favor, hazlo, paga ahora que tienes un sugar daddy que te lo pagará todo. Para alguien que se mueve en silencio seguro que habla mucho de vuestros planes. Drenarme mentalmente… Eres patética, incluso peor que cuando dijiste: ‘bueno, entonces vas a tener que romper conmigo’, para que puedas hacerte la víctima de la forma que te gusta”
“Nunca me has ayudado a hacer dinero, siempre me has costado dinero. ¿Ahora crees que te mereces la mitad de mi mierda? Que mocosa pomposa titulada eres. Te escupo. Te reto a empezar tu estúpida campaña. Tus amenazas ya no funcionan aquí, ¡están despedidos! Eres responsable de tus emociones. No te has preocupado por mi vida porque has vendido información sobre mí, así que yo no me preocupo de la tuya. Ni siquiera te odio, solo no me importas. Hace ya tiempo que no estoy enamorado de ti”, continuaba Adesanya, “En resumen, me alegro de que esto haya pasado, no cambiaría ni una maldita cosa. Me alegro de tener finalmente a alguien que pueda soportar estar a mi lado y no sienta que mi brillo apaga el de otros. Seguro de su propia luz”.
