Una nueva investigación ha descubierto que los gatos toman sus propias decisiones cuando quieren jugar: recuperan objetos solo cuando a ellos les apetece. Los resultados de este trabajo se publican en Scientific Reports.
El descubrimiento es importante porque los gatos son difíciles de amaestrar: entrenarlos como hacemos con los perros es prácticamente imposible.
Por ejemplo, recuperan un juguete sin que nadie se lo pida y cuando lo hacen intentan que los dueños se unan a la experiencia. Nos embaucan con facilidad.
El nuevo estudio ha comprobado que este comportamiento es mucho más común de lo que pensamos entre los gatos domésticos. También descubrió que la mayoría de las veces el gato es el que inicia el juego. @levante-emv