Una mujer fue desahuciada a las 13.00 horas de este lunes de un piso en el que vivía con 30 gatos en el municipio de Cangas. La mujer solicitó a los agentes de la Policía Local tiempo para poder retirar sus pertenencias y sus animales. Además, insistió en que los gatos no le hacían mal a nadie y que estos no habían estropeado el piso, sino que ya estaba mal de antes. Los propietarios aseguran que el contrato había caducado hace cuatro años y que la inquilina no quería marcharse, motivo por el cual acudieron a la vía judicial.