El 25 de enero de 1995, el exfutbolista del Manchester United golpeó a Matthew Simmons, un aficionado del Crystal Palace que estaba en primera fila y que estuvo todo el partido insultándole: “¡Vete a tu país, bastardo de miеrda! ¡Vuelve a Francia!”.

Ocurrió en Selhurst Park, estadio del equipo rival. Una tarjeta roja directa lo expulsó del partido, pero las consecuencias no acabaron en el campo. Cantona fue condenado a 120 horas de trabajos comunitarios y a una multa de unos 27.000 euros. Sin embargo, lejos de arrepentirse de su reacción, afirmaba que “debería haberle dado más fuerte. Me sentí genial. Aprendí de ello y creo que él también”.

Además, en una entrevista para el programa televisivo ‘Football focus’, se reafirmó cuando le preguntaron cuál había sido el mejor momento de su carrera deportiva: “Fue cuando le di la patada de kung-fú a un hooligan, porque esa gente no tiene nada que hacer en un partido. Creo que para algunos es un sueño dar una patada a ese tipo de gente. Así que lo hice por ellos, para que estuvieran felices“. @ElHuffPost.