Mención especial a los que en estos casos no ven venir el desastre y dejan sus coches ahí a huevo, o se ponen en medio de la carretera.
Esta vez ha sido un zombie del móvil.
Hace solo 10 días pasó lo mismo en la misma estación, aunque esa vez fue una mujer empujada por alguien que parecía estar desmayándose.