Un caballero rocoso nos explica la separación por colores de las pesas en las máquinas de su gimnasio: “Aquí estamos los de los inyectables, los que nos vamos a morir dentro de poco”

Un caballero rocoso nos explica la separación por colores de las pesas en las máquinas de su gimnasio: "Aquí estamos los de los inyectables, los que nos vamos a morir dentro de poco"

[Ver vídeo en Twitter]

Tiene canal de Youtube. En este vídeo cuenta una anécdota interesante.

Extra: ¿Alguien aquí ha discutido alguna vez con un policía?

Los ricos no quieren morir: y eso puede mejorar tu vida.

La vacuna contra el envejecimiento BioViva está en su fase 3 de estudio en Estados Unidos, lo que significa que se ha comprobado su eficacia en humanos. Si alcanzara la fase 4 (lo que no es seguro) sería aprobada como medicamento. Su CEO Liz Parrish, con su terapia (o vacuna) está aplicando a humanos lo que María A. Blasco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, consiguió en 2008 en ratones.

Con quien transigen los científicos europeos es con Liz Parrish, CEO de BioViva Science, de EEUU. A sus 53 años asegura que sus células tienen 30, y… bueno, o se ha operado muy bien, o ha falsificado su fecha de nacimiento, o su terapia funciona. Aunque no ha sido revisada por científicos independientes, se supone que usa dos terapias génicas, una dedicada a alargar sus telómeros, y la otra a inhibir el envejecimiento celular. @martinsacristan

Los ricos no quieren morir: y eso puede mejorar tu vida.

Los ricos no quieren morir: y eso puede mejorar tu vida.

Una de esas noticias que parecen de El Mundo Today

Muy apropiada para lo que se viene hoy.

Una de esas noticias que parecen de El Mundo Today

“¿Uno-cinco-cero dijiste, de Irigoyen?”. La inocente pregunta de un taxista está causando sensación en Argentina después de que el radio taxi interfiriera con la señal de la Estación Espacial Internacional, sonando en directo durante la retransmisión oficial de la NASA de una caminata espacial. En la madrugada del martes, los cosmonautas rusos Sergey Prokopyev y Dmitri Petelin pasaron siete horas y 55 minutos fuera de la IIS para mover un radiador. Durante la caminata espacial, la estación pasó varias veces por Argentina. @gizmodo