Esta es una de esas historias que, si el protagonista la leyese, desearía volver atrás para poder escribir de nuevo el desenlace. El arrepentimiento forma parte de algunas decisiones que tomamos en la vida y la de este hombre no es para menos. ¿Qué haría si pudiera viajar en el tiempo y aterrizar en el día en el que rechazó 200.000 euros? @as
Extra: cinco bulos progresistas sobre la crisis de la vivienda.