El logo de Spotify es verde, pero funde a negro. El capitalismo financiero apaga la luz en los contextos más insólitos. La compañía con sede en Estocolmo (Suecia) que domina el mercado del streaming musical —controla el 34,8% del negocio frente a gigantes como Youtube Music, Apple Music, Amazon Music, Tencent Music y NetEase—, ha subido este año en Bolsa el 124% y durante el tercer trimestre obtuvo 32 millones de euros de ingresos de explotación, contabilizó 574 millones de usuarios activos y las ventas totales crecieron a un ritmo interanual del 11% hasta 3.357 millones de euros, y, por lo tanto, debería viajar en Fórmula 1. Pues no. Regresa al negro. @elpais
¿Se preguntaban lo mismo cuando no paraban de contratar gente estando en pérdidas? Igual es que ahora buscan ya beneficios porque los inversores están pidiendo resultados.