Cuando decía que estaban poniendo los listones a una altura que ellos mismos no iban a poder saltar, no imaginé que iban a tener tan poca dignidad cuando ese momento llegase.
Cuando decía que estaban poniendo los listones a una altura que ellos mismos no iban a poder saltar, no imaginé que iban a tener tan poca dignidad cuando ese momento llegase.
Varios menores del centro de menas de la Casa de Campo denunciaron el pasado mes de septiembre que habían sido agrеdidos sеxualmente por al menos una educadora magrebí que trabajaba allí. Contaron los hechos a la dirección del centro, la Fundación Antonio Moreno, que abrió una investigación y denunció el caso a la Policía Nacional. Finalmente, fue despedida una de las educadoras y a otra no se le renovó el contrato cuando finalizó su relación laboral. @elmundo
Ya sabéis que poca simpatía tengo por Vito Quiles, pero aún menos por esta gente.
Cuando se insulta, se hace el vacío, se desprecia y no se permite el desempeño de su labor periodística a compañeros “incómodos” no subvencionados por el estado, no hay comunicado ni apoyo alguno.