Nada más conocer que había conseguido el premio, Yildirim decidió dejar su trabajo y se compró varios caprichos como un Ferrari 448 Pista de 376.000 euros, un Porsche Turbo S Cabriolet, por 249.000 euros y también se autoregaló un reloj de lujo.
El millonario ha asegurado que quiere tener una novia con la que compartir sus millones. Sobre sus gustos, Kursat Yildirim no tiene preferencias: legustan “rubias o morenas, no me importa”, asegura. “Solo quiero enamorarme. Busco una mujer a la que le encante viajar y que esté lista para formar una familia conmigo. Necesito una mujer en la que pueda confiar sin importar lo que pase”, redunda.@eldia
“Necesito una mujer en la que pueda confiar” y lo hace con el reclamo del dinero… no sé si es una buena estrategia…