Un matrimonio que reside Florida está viviendo una auténtica pesadilla tras la supresión del derecho al aborto por parte del Tribunal Supremo de Estados Unidos el año pasado. Deborah Dorbert y su marido Lee esperan su segundo hijo, pero los médicos ya les han dicho que su bebé nacerá muerto o al poco de nacer. No se podrá hacer nada para evitarlo. Pese a ello, a este matrimonio se le ha negado la posibilidad de abortar y deberá enfrentarse al trance de ver morir a su hijo o hija. @publico
Enviado por Nejo.