La polémica es tal que hasta el mejor nadador de todos los tiempos, Michael Phelps, se atrevió a calificar esta situación como algo similar al dopaje: “Todos deberíamos sentirnos cómodos con quienes somos en nuestra propia piel, pero creo que todos los deportes deberían jugarse en igualdad de condiciones para que haya justicia. Este es mi deporte, este ha sido mi deporte durante toda mi carrera y, sinceramente, lo único que me encantaría es que todos pudieran competir en igualdad de condiciones”, sentenció. @larazon
Reacting to ongoing debate over trans college athlete Lia Thomas competing on the women’s swimming team, “it’s very complicated,” says @MichaelPhelps. “We all should feel comfortable with who we are in our own skin. But I think sports should be played on an even playing field.” pic.twitter.com/brsq7t2vJW
— Christiane Amanpour (@amanpour) January 13, 2022
Hay dos tesis que se me ocurren con este asunto… O realmente haber sido hombre te da una ventaja clara, o la competitividad en el deporte femenino es extremadamente baja comparada con el masculino. O ambas son correctas.
Me gustaría hacer algún experimento metiendo a unas cuantas mujeres de la élite de algún deporte a competir durante un tiempo contra hombres, y devolverlas de nuevo a la categoría femenina, a ver si vuelven al mismo nivel, o han mejorado.