El fraude fiscal en la venta de hidrocarburos se ha disparado en España en los últimos meses. En parte, porque los defraudadores están aprovechando para exprimir su operativa antes de que entre en vigor, el próximo 28 de marzo, un nuevo mecanismo de control que el Gobierno aprobó a finales de 2023 y que pasa por limitar los intermediarios que pueden participar en la comercialización de combustible. Durante esta suerte de moratoria, los mercados han detectado un incremento significativo de ofertas de combustible, principalmente de diésel, a precios anormalmente bajos. El repunte ha sido tan llamativo que ya ha captado la atención de la Guardia Civil. @elmundo